Portada Programa Ampliar el estado social
Ampliar el estado social Imprimir E-mail

HACIA LA SOCIEDAD DEL BIENESTAR

Nuevos derechos, nuevos sujetos, nuevas responsabilidades, mayor igualdad.

Nuestra prioridad consiste en profundizar y ampliar el Estado del Bienestar para consolidar la sociedad del bienestar en Andalucía. Proponemos alternativas que satisfagan la demanda de nuevos derechos y correlativamente la atribución de nuevas responsabilidades, así como la necesidad de incorporar a los nuevos residentes. De este modo alcanzaremos una mayor igualdad, convergeremos con la media española y europea y superaremos la actual situación de mala calidad de los servicios públicos, circunstancias que denotan una estructura propia de países dependientes. Incluso en esperanza de vida estamos por debajo de la media española.

Desgraciadamente en los últimos años hemos visto como ha crecido en Andalucía la desigualdad, la pobreza extrema y la marginalidad, sin que apenas ocupe lugar en los medios de comunicación. Inmigrantes, enfermos mentales que duermen en la calle o están en las cárceles, mujeres maltratadas o familias desestructuradas son una dura realidad que apenas tiene respuesta desde las Administraciones. Al mismo tiempo la desigualdad entre los que más tienen y la ciudadanía media crece exponencialmente. Cuanto mayor es el grado de desigualdad en la distribución de la renta, mayor es el grado de insatisfacción de los menos favorecidos y más se reduce la cohesión social.

Hay que partir de las nuevas necesidades que producen los grandes cambios que están teniendo lugar en nuestra sociedad como la transformación de la estructura social por la llegada de inmigrantes. Esta situación, entre otros efectos, puede producir una estructura dual si no se contrarresta por políticas progresistas: por abajo, servicios públicos de baja calidad, en el caso de que puedan acogerse a ellos, para inmigrantes y marginados y por arriba, rebajas fiscales, plusvalías patrimoniales y servicios privados “étnicamente” limpios. 

En los últimos años hemos asistido a un fuerte crecimiento demográfico a causa de la inmigración. No se trata, pues, de desarrollar políticas natalistas. Europa ha sido siempre un continente de baja fecundidad demográfica y éste ha sido uno de los secretos de su éxito económico. Se trata de garantizar la igualdad y la calidad de vida. Igualmente es necesario equilibrar este crecimiento con el objeto de evitar que se produzca un desarrollo dual en nuestro territorio ya que actualmente crece la costa (Málaga, Almería, Cádiz), Sevilla y Córdoba y decrece el interior: Granada, Córdoba, la sierra de Jaén y Huelva y Cádiz capital.

También es necesario contemplar las nuevas necesidades de las familias donde por necesidad se suele sacrificar el contacto con los hijos porque se trabaja fuera de casa. El papel cada vez más intenso que está teniendo los grupos de edad en la socialización de los jóvenes, muy influidos por modelos competitivos y consumistas, hay que contrarrestarlo por una socialización basada en nuestros valores culturales de cooperación y tolerancia.

Como nacionalistas nuestro principal objetivo es contribuir a la existencia de una sociedad andaluza articulada, activa, culta, cohesionada y solidaria que utilice todo nuestro acervo cultural para satisfacer de la manera más eficiente nuestras necesidades colectivas e individuales. 

Los ejes que estructuran nuestra propuesta tienen como denominador común el valor de la igualdad como el principio básico que debe conformar toda nuestra sociedad. La igualdad debe estar en equilibrio con la idea de mérito, mediante el establecimiento de límites a la desigualdad, la supresión de privilegios y la garantía de un mínimo vital para todos los residentes en Andalucía. Así alcanzaremos plenamente el objetivo de la igualdad de oportunidades. 

PRINCIPALES LÍNEAS DE ACTUACIÓN

- Autonomía personal.

El principio sobre el que descansa la vida es el principio de autonomía. Este programa rezuma autonomía por todos sus poros, tanto en su dimensión colectiva como personal. La base de la autonomía personal descansa en un trabajo estable, una formación adecuada, la garantía de la satisfacción de las necesidades básicas y un entorno seguro y habitable. Eso es lo que queremos para todas las personas y es el núcleo de nuestro programa para Andalucía.

- Potenciar los valores de convivencia propios de la cultura andaluza frente a los valores consumistas y desarrollistas.

Los valores propios de la cultura andaluza se basan en la autonomía personal y colectiva y en la tolerancia. Valores aún más necesarios, si cabe, en la sociedad intercultural hacia la que caminamos y a la que hay que impregnar de menos consumismo y de mayor aprecio hacia las cosas importantes como la salud. Nuestra identidad como pueblo ancestral que, a través del territorio como transmisor cultural, ha podido pervivir en un proceso continuo de mestizaje es una defensa de esta extraordinaria riqueza frente a los procesos de aculturación causados por la globalización. Queremos ayudar a conseguir una sociedad con fuertes vínculos de convivencia mediante la revalorización de la tolerancia, la cultura y la solidaridad para erradicar la violencia y la inseguridad.

- Extender la idea de igualdad sin distinción de ciudadanía.

Uno de los mayores riesgos que corremos es establecer dos clases de personas. Las que tienen derechos porque gozan del atributo de la ciudadanía y los que carecen de ellos. La igualdad es un valor universal y como tal lo queremos aplicarlo.

Es imprescindible afrontar la realidad de la inmigración evitando guetos sociales y culturales. Para ello es necesario contar con todas las personas y su singularidad cultural al prestarles los derechos y proporcionales los servicios públicos adecuados a sus necesidades. Así, al mismo tiempo que impedimos la inmigración ilegal, colaboramos con el progreso de los territorios emisores de inmigrantes.