El Museu de Les Mines de Bellmunt del Priorat se encuentra en el antiguo complejo industrial de la Mina Eugènia y en el interior de la misma mina. De esta forma el museo pretende mostrar y explicar la importancia de la minería del plomo en la comarca del Priorat a través de los siglos.
La Mina Eugènia, situada a 400 metros del pueblo de Bellmunt del Priorat, fue la más importante de las minas de la zona debido a sus dimensiones y rendimiento extractivo. El sistema de explotación utilizado era el de galerías unidas por pozos verticales, se trata pues de minería subterránea. La Mina Eugènia tiene un total de 20 plantas o niveles subterráneos que llegan hasta los 620 metros de profundidad, y un entramado de unos 15 Km de galerías. En la boca de la mina se levanta el conjunto industrial minero-metalúrgico, construido entre finales del siglo XIX y principios del siglo XX, como complemento de la actividad de extracción minera. De esta forma se procesaba in situ el mineral objeto de la explotación, la galena, y se obtenía el plomo en forma de lingotes. El complejo industrial está formado por el castillete de extracción, la sala de maquinas, el lavadero, los talleres, los almacenes, la fundición y las chimeneas de conducción de los humos.
La explotación minera en la comarca del Priorat tuvo su máximo esplendor entre finales del siglo XIX y principios del siglo XX, coincidiendo con la industrialización, a pesar de que el yacimiento de plomo de esta zona era conocido y explotado des de la Prehistoria, hace unos 3.000 años. La visita a las instalaciones de la Mina Eugenia se puede complementar con un paseo por la antigua colonia minera, construida entre los años 1920 y 1960, y por los alrededores del majestuosos edificio de la dirección y la administración de la empresa Minas del Priorato, S.A, conocido como “La Casa de les Mines”. Este edificio, construido el año 1905, sigue el estilo modernista de la época. Además, el visitante podrá disfrutar de un paraje diferente, rodeado de bosques y campos de viña y olivos; y es que no se puede olvidar que el Priorat siempre ha sido a lo largo de su historia, una comarca eminentemente agrícola.
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