La Colònia Güell ha sido un referente para el estudio de la arquitectura de Antoni Gaudí, y se considera uno de los conjuntos modernistas más importantes de Cataluña. Dentro del conjunto de colonias existentes en el país, la Colònia Güell destaca por el hecho de poseer una buena muestra del estilo modernista aplicado en el ámbito de la arquitectura civil y industrial.

Eusebi Güell, amante de las artes y reconocido mecenas, encargó el proyecto de urbanización de la colonia al estudio de Antoni Gaudí, donde colaboraban otros arquitectos como Francesc Berenguer i Mestres y Joan Rubió i Bellver.
En la Colònia Güell encontramos los rasgos más característicos de este movimiento. Por un lado la utilización del ladrillo a la vista como reivindicación de una arquitectura popular y tradicional catalana, y la incorporación de nuevas técnicas y nuevos materiales constructivos como el hierro o el trencadís de cerámica. Y a la vez, la adopción de elementos de aire historicista basados en la recuperación de estilos del pasado como el medieval y el mudéjar, reinterpretados con la intención de encontrar una arquitectura nacional propia. Finalmente, la revalorización de la artesanía y de las artes como son la cerámica, el hierro forjado, y el vidrio aplicadas en la arquitectura, tanto en los acabados exteriores como en la decoración interior.
El trabajo de Gaudí se centra en el edificio de la Iglesia, aunque se cree que también colaboró en el planteamiento urbanístico de la colonia. En la Colònia Güell, Gaudí experimentó con las formas más originales, y más que en ninguna otra obra, halla su modelo en la naturaleza. Muchas de las soluciones arquitectónicas que aplicó en esta obra las aplicaría más tarde en el templo de la Sagrada Familia.
En los edificios que se atribuyen de forma más clara a Francesc Berenguer i Mestres, observamos un trato muy personal de los elementos decorativos, como son la utilización moderada de mosaico cerámico (trencadís), la disposición del ladrillo a la vista y el trabajo del hierro forjado. También es característico el tratamiento plano y equilibrado de las fachadas, y el claro planteamiento volumétrico de sus edificios.
En los edificios de Joan Rubió i Bellver, el ladrillo a la vista se convierte en el protagonista y se utiliza como pieza modulada que permite soluciones diferentes, ya sea decorando y organizando fachadas como conformando originales estructuras. Las plantas de sus edificios plantean un diseño más complejo que las de Berenguer, como es el caso de Ca l'Espinal. La reinterpretación de los estilos del pasado se hace presente en los edificios con la incorporación de elementos de carácter goticista. La acentuación de las esquinas mediante voladizos y tribunas es otro de sus rasgos más característicos.

Edificios más significativos. Un paseo por la Colònia Güell
Los edificios de la Colònia Güell son una buena muestra de la arquitectura modernista aplicada a usos civiles, industriales y religiosos. El proyecto de urbanización fue encargado al estudio de Antoni Gaudí, donde colaboraban otros arquitectos como Francesc Berenguer i Mestres y Joan Rubió i Bellver.

La colonia está formada por la fábrica textil, las residencias de los obreros y unos edificios representativos, todos ellos inscritos en una urbanización de calles y manzanas propias de finales del siglo XIX. En la Colònia Güell el pasado y el presente se funden en un paisaje de principios de siglo.
Al adentrarnos en sus calles y contemplar el entorno descubriremos edificios de gran belleza.

Recinte Industrial , Fonda , Can Soler de la Torre,  Dipòsit d'aigua, Ca l'Ordal, Cases d'Obrers, Casa del Metge, Ca l'Espinal , Escola i Casa del Mestre, Teatre Fontova i Ateneu Unió, Centre Parroquial Sant Lluís , Antic Convent de Monges, Casa del Secretari, Cooperativa, Magatzems / Carboneres, Cripta Gaudí, Casa ,  Parroquial, Can Julià de la Muntanya, Torre Salvana