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El Gescrap Bizkaia y el Caja Laboral se juegan en el Bilbao Arena una plaza en el 'Top 16' de la Euroliga con un ojo puesto en la cancha del Bennet Cantú, un Pala Desio donde una derrota del Fenerbahce Ulker beneficiaría al Baskonia en caso de que no gane en Miribilla.

No obstante, con el equipo local ya clasificado para la siguiente fase, el que se la juega en tierras italianas es el conjunto turco, al que le ha complicado mucho las cosas su derrota en casa de la pasada semana frente a un pletórico Bizkaia.

Ese épico triunfo es, precisamente, el que permite a los de Fotis Katsikaris, casi eliminados hace dos semanas, poder jugarse en la última jornada estar entre los 16 mejores y para lograrlo necesita ganar el derbi más histórico que recuerda el baloncesto vasco.

En el anterior encuentro con el Caja Laboral consiguió en la primera vuelta, ganando en el Iradier Arena de manera épica en los últimos minutos, la primera de las dos grandes gestas que le mantienen con opciones.

Esa victoria le da al conjunto bilbaíno una importante ventaja de cara a los triples e incluso el cuádruple empate que se puede dar en la clasificación del Grupo A de la Euroliga en caso de ganar.

Algunos de esos múltiples empates, en todos en los que no entre el Fenerbahce, al que le ha ganado los dos partidos, son precisamente los que penalizan a un Caja Laboral para el que una eliminación tan temprana le resultaría dramática.

De todos modos, el Baskonia es muy fiable en choques a vida o muerte ante el Bizkaia, al que se ha impuesto en las tres veces que se han medido en la Copa del Rey (en 2008, Vitoria en semifinales; y en 2010 en Bilbao y en 2011 en Madrid en cuartos de final); y las dos que se han encontrado en la Supercopa, ambas en cancha vizcaína (la final de 2007 y en semifinales en 2011).

Esos precedentes minimizan, por tanto, a priori la influencia que pudiera tener el llamado 'efecto Miribilla', el apoyo de la grada que impulsó a 'los hombres de negro' la temporada pasada a lograr el subcampeonato liguero ganando tres veces seguidas al Real Madrid.

Esta vez ese apoyo se cifra en las 10.000 gargantas que acudirán al Bilbao Arena dispuestas a llevar en volandas a un nuevo hito a un equipo al que le agradecerán de inicio la gesta de la semana pasada en el Sinan Erdem Arena de la capital turca.

En no menor disposición anímica llegarán los de Dusko Ivanovic a Bilbao después de su incontestable victoria en la última jornada de la Liga ACB en la capital alavesa sobre el todopoderoso FC Barcelona.