Las tensiones musculares y sobrecargas son frecuentes en la población, tanto en las personas que realizan ejercicio físico como en las que no. Pero ¿sabemos por qué se producen? La explicación está en entender la función muscular y cómo el sistema nervioso juega un papel fundamental en todo lo relacionado con el movimiento humano.
Tener una patología como la diabetes tipo 1 no debería ser un impedimento para entrenar la fuerza. En este artículo intento mostrar las ventajas de un entrenamiento de fuerza para las personas con esta patología y hacer entender que siempre se puede hacer ejercicio, sólo hay que conocer las caracterísitcas de cada caso en particular.
Hasta la actualidad se ha defendido el entrenamiento de la flexibilidad para prevenir lesiones o para elongar nuestra musculatura. Deberíamos de empezar a plantearnos si lo que hemos venido haciendo hasta ahora es del todo correcto. Diferentes estudios e investigaciones demuestran que todo esto es discutible.
En los deportes en los cuales se dan altas intensidades de esfuerzo y se realizan gestos técnicos explosivos, el organismo tiene unas necesidades energéticas muy concretas. En este artículo, Jordi Sarola nos da una serie de recomendaciones nutricionales de mucha utilidad para hacer frente a esta situación.
¡Todo el mundo puede hacer ejercicio! En este caso Serafín Murillo nos habla de como personas con diabetes realizan actividades de alto rendimiento deportivo, venciendo sus limitaciones.